Es curioso lo que puede llegar a sorprenderse el ser humano. Y dicen que esa capacidad es genial, que ayuda a mejorar, a crecer como personas. Menos mal que sacamos algo positivo de esto...
Lo que me sorprendió la semana pasada y que al parecer no sorprendió a muchos más, fueron los datos de la EPA (Encuesta de Población Activa) de Octubre. La EPA refleja la realidad laboral de nuestro país. Y en esta foto vemos a unos seres desdibujados, apartados, expulsados: las mujeres.
En el tercer trimestre de este 2014 el empleo masculino crece con fuerza (+164.900). Sin embargo, se destruye empleo entre las mujeres (-13.900). Y esto, en términos interanuales, empeora mucho. Mientras que el empleo masculino crece a tasas del 2,4% (+221.000), el empleo femenino crece tan solo un 0,7% (+52.900). Y mucho peor es la situación entre las mujeres jóvenes, ya que la franja de edad entre 30 y 40 años refleja un descenso en ocupación neta de más de 40.000 personas.
En 2006 España estaba en el puesto 11, según el Foro Económico Mundial, de los países del mundo donde la brecha de género en cuestiones de igualdad laboral era más pequeña. En 2014, estamos en el puesto 29, liderando junto a Grecia la cola de Europa en estos términos. (Datos recogidos en ElDiario.es)
Somos un país que retrocede a zancadas. Vamos camino a la mitad del siglo XX. Camino a la cocina. Ahí es donde este país quiere que estén sus mujeres, ¿verdad?
Es increíble el poco impacto que ha tenido esta noticia, que refleja una triste y pésima realidad, trimestre a trimestre. Un goteo constante de mujeres expulsadas del mundo laboral. Mujeres fuertes, valientes, trabajadoras. Mujeres que saben organizarse, liderar equipos, con creatividad, con iniciativa. Mujeres con capacidad de sacrificio, sin limite de esfuerzo, polivalentes. Mujeres preparadas para un mundo laborar que ven cada vez más inalcanzable.
Todas estas mujeres deben volver a casa. No por gusto, o porque así lo decidan. Cuando la opción es trabajar en el hogar, todos mis respetos a ese esfuerzo, a esa labor, invisible muchas veces y necesaria siempre. Pero cuando la vuelta a casa es un fracaso en el mundo laboral, como los de estas 13.900 mujeres que han sido despedidas en este tercer trimestre de 2014, no podemos más que gritar a los cuatro vientos: ¿hasta cuando vamos a permitir estas expulsiones?
13.900 mujeres expulsadas del mercado laboral en España.
¿Hasta cuando lo vamos a permitir? Clik para twittear
Las mujeres queremos una igualdad de género real. Y cuando digo real es en todos los aspectos: tengamos o no familia, queremos conciliación. Trabajemos en el sector público o privado, queremos los mismos salarios, las mismas condiciones económicas y laborales. Queremos acceder a todos los sectores, a todos los puestos posibles.
Pues sí, sigo sorprendiéndome... Y mando 13.900 abrazos y 13.900 alientos: esto tiene que cambiar. Va a cambiar. Las mujeres juntas podemos hacer lo increíble.
Pues sí, vamos para atrás. Entre que en este país hay que echar más horas que un reloj cuando se trabaja fuera de casa, que la gente no entiende lo del teletrabajo y que la conciliación es inexistente, aquí tienes a una de esas que se preñó, no concilió y ha vuelto camino de casa (a la cocina aún tengo que decidirme a entrar).
ResponderEliminarEs muy triste. Y muy muy indignante. Somos el mejor capital que puede tener una empresa. ¿Que esta pasando en este pais?
EliminarYo creo que por más que se hable de igualdad, las mujeres seguimos siendo ciudadanas de segunda...
ResponderEliminarHay que indignarse y alzarse contra este retroceso..
EliminarEs una pena.
ResponderEliminarMucho. Y tenemos que rebelarnos. ¿Por qué nos toca siempre a las mujeres?
EliminarYo ahora mismo estoy de vuelta a casa, pero vuelvo del trabajo. En este país donde para las empresas somos números, es imposible conciliar. Yo trabajo a hora y media de mi casa y mi empresa, aunque tienes centros mucho más cercanos a mi hogar, se niega a trasladarme. Eso si, traslada a gente que ni siquiera a pedido dicho traslado.
ResponderEliminarEso es peor. Cuando ves lo que pueden hacer y no lo hacen porque no se les pone en los ******es. En fin! Espero que puedas solucionarlo
EliminarTriste, muy triste!!! Asco de país!
ResponderEliminarPues es el que nos toca. Y yo me niego a creer wue no este en nuestra mano hacer algo...
EliminarTriste pero real. Y encima lógico teniendo en cuenta otras noticias: no es que se despida a mujeres, si no que se contrata a más hombres que a mujeres (querida Mónica que señala una realidad....) y cuando los dos trabajos son incompatibles con la organización familiar (recoger a los hijos, pagar ayuda, o simplemente conciliar) es la mujer quien abandona el trabajo porque económicamente los hombres (siempre en general) tienen sueldos más altos.
ResponderEliminary así nos va.
besos
Como en las administraciones esto no pasa (hay cosas peores) me cuesta mucho concebir que en la empresa privada, por el mismo trabajo, coben más los hombres que las mujeres. ¿Hasta cuando lo vamos a permitir? Claro que si no somos nostras las que luchamos por esa igualdad... Apaga y vamonos. Yo me contento con que nuestras hijas tengan una situacion mejor.. La esperanza, que no se pierda. Y mientras tanto, lucharemos por mejorar esta situación
EliminarHoy sin ir mas lejos a una amiga recién operada con una histerectomía y reincorporandose a tras el alta tuvo un accidente laboral, la recomendación que aguante, porque si se toma una nueva baja la despedirán. Que hace? Se lo aguanta, pq tiene como muchas familia, bebe de 3 años, hipoteca y marido informático con salario "español". Así no avanza un país, prefieren hombres calienta puestos, presentistas, y nos desdeñan por ser madres y criar a nuestros hijos, lo que nos deja sin opciones y a los padres responsables viviendo una falsa conciliación. Vivimos con miedo en el cuerpo. Las hipotecas no se pagan solas,no es problema de las mujeres sino de la sociedad en general.
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